El Territorio Mägico Chileno Parte I

El Territorio austral de Sudamérica es Mágico, eso explicaria por ejemplo por qué un imperio tan poderoso como el de los Incas mostraba interes en la zona más alejada del continente, aún cuando este carecía de riquezas materiales. Todo el continente Américano está cargado con estas fuerzas sobrenaturales, pero de todos modos esta está más presente en la zona sur, y mientras más al sur, más latente es. Los epicentros energeticos son sobre todo Chiloé y la zona austral de Chile; y La Patagonia Argentina. Aquí habitaban numerosos pueblos que carecían de un gran desarrollo tecnológico, puesto que intuian que el progreso es el camino a la destrucción. Su cosmovisión los guiaba a la renovación natural y a la expansión espiritual. Como último pueblo de esa zona que prevalece en pie, los mapuche tienen una gran importancia hoy en día, pero la influencia de goniernos Norteaméricanos y Europeos en Chile apuntan a desmembrar y destruir a los araucanos. La Razón por la cual la magia se concentra en este sector podría ser la siguiente: El mandato divino, incomprensible para nosotros, envió una serpiente para instruir a la raza humana. Su anterior experimento en el Viejo Mundo fue un fracaso, la corrupción acabó con el equilibrio espiritual de los Europeos, dejando solo sofistas de tendencias cada vez más rebuscadas y barbaros de actitud primitiva. Por lo tanto el segundo intento fue aquí, más precisamente en México. Una vez que hubieron pasado un par de milenios para que las culturas se desarrolasen y relasionasen, Qetzalcoátl se apareció ante los aztecas y les instruyó acerca de diversas costumbres, entre ellas la agricultura y la astronomía. Posteriormente la serpiente instructora fue avanzando por el continente, hacia el sur, impartiendo sus doctrinas al resto de los pueblos. Así, entre los Mayas fue Kukulkán, en Guatemala Gucumatz y entre los aimarás, Amaru. El último lugar que visitó fue la zona sur de nuestro continente, por eso su influencia mágica aún perdurá. Aunque se dice que en el viejo mundo se enteraron de la civilización que llegaría desde el norte, que al culturizar de manera espiritual a la gente haría surgir la Cuarta Potencia; con la que los Mayas, los Aztecas y los Incas consolidaría el Tahuantinsuyu, la Tierra de la cuatro Regiones. Por eso diezmaron y evangelizaron con tanto fervor a los indigenas, no les dieron la oportunidad a los Mapuche ni los Alacalufes de evolucionar culturalmente. Sin embargo; la Historia no se detendría aquí: El Mandato Divino aún tenía muchos planes para Nuestra Tierra.